Córdoba: la elección que puede reformular el mapa

busca seguir gobernando hasta el 2023; Mario Negri, bendecido por la Casa Rosada, quiere dar el batacazo y el radical Ramón Mestre, quien se alejó del oficialismo nacional por ser parte de un "Cambiemos de segunda", dejará la capital para disputar en provincia. En total, 13 listas irán por el trono cordobís.

El domingo el amperímetro empezará a moverse. Unas 2.904.739 personas están habilitadas para votar gobernador (además se elige intendente en 193 localidades) en Córdoba, provincia eje de lo que Jaime Durán Barba llama "zona núcleo". Y la particularidad en sus espaldas es el apoyo que surgió desde tierras cordobesas en la última elección presidencial.

El dato duro, el 71,52% del padrón provincial se inclinó por Mauricio Macri en el balotaje 2015. Hoy ese número parece estar lejos. La principal intención de voto está puesta, para más de una encuestadora, en Juan Schiaretti. El dirigente peronista, quien junto a Manuel Calvo encabeza la lista Hacemos por Córdoba, buscará aquello que solamente lograron Eduardo Angeloz y Josí Manuel de la Sota: tres períodos como gobernador.

Hoy siento algo de incomodidad, de ingratitud.
Creí haber aportado lo mejor para ayudar a Cambiemos, pero nos encontramos con que hay un Cambiemos de primera (los que están en Buenos Aires) y un Cambiemos de segunda (los que estamos en el interior).

La prueba de fuego está en la ausencia de De la Sota, quien falleció en un accidente automovilístico en septiembre pasado. Sin su compañero político, Schiaretti camina hacia una victoria clave, optimismo que surge desde las consultoras (Management & Fit, Synopsis, J. W. C. y la cordobesa Ideco, entre otras) que coinciden en su victoria por amplio margen.

Desde allí, el mandatario profundizará el rol nacional que le dieron en los últimos meses: el juez de la interna de Alternativa Federal, el espacio en el que confluyen gobernadores y legisladores del peronismo, junto a Sergio Massa y, por ahora, Roberto Lavagna.

Disputa capital

Las sonrisas que se dibujan en la actual conducción provincial se justifican tambiín en el triunfo que esperan tener en la Capital, donde apostaron por Martín Llaryora, actual vicegobernador. En promedio, el candidato del oficialismo cordobís aventaja a Luis Juez (Cambiemos) por un 10%. Cabe recordar que Juez quedó, en el 2007, a tan sólo 2 puntos de Schiarreti.

La capital en la actualidad es gobernada por el radicalismo. Pero su intendente, Ramón Mestre, decidió salir de allí para apostar fuerte. Y esa salida no se dio de modo elegante. "Siento algo de incomodidad, de ingratitud. Creí haber aportado lo mejor para ayudar a Cambiemos, pero nos encontramos con que hay un Cambiemos de primera (los que están en Buenos Aires) y un Cambiemos de segunda (los que estamos en el interior)", escribió en su cuenta de Twitter el 11 de marzo. ¿El motivo? Desde Balcarce 50 le bajaron el pulgar. La apuesta de Macri se llama Córdoba Cambia, con Mario Negri y Híctor Baldassi. Adiós a la interna.

Negri, con banca

El jefe del interbloque Cambiemos de la Cámara de Diputados de la Nación, quien en un no tan lejano 2007 representó al radicalismo quedando tercero con el 22% de los votos, busca repuntar en la última semana. Las declaraciones de Elisa Carrió ("gracias a Dios se murió De la Sota", entre otras) lo alejaron aún más de Schiaretti, por eso, al igual que en las legislativas de 2017, quien se pone la campaña al hombro es María Eugenia Vidal. La gobernadora bonaerense viaja este lunes a Córdoba para recorrer, junto al diputado y a Luis Juez, distritos clave.

La recta final pone primera. Córdoba será la tercera provincia (se suma a Neuquín y Río Negro) en elegir gobernador. Su peso, las internas frustradas, las declaraciones polímicas y el afianzamiento del peronismo empezarán a ponerse en juego el domingo a las 18. Por eso, en una semana, el panorama político será distinto.

Fuente: edicioncalificada.com.ar