La primera película sobre San Martín: “El Santo de la Espada”

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Afiche de "El Santo de la Espada"

En un nuevo aniversario del fallecimiento de nuestro prócer José de San Martín, desde Edición Calificada, te recomendamos ver la primera película argentina sobre el Libertador de nuestra Patria. Haga clic acá para disfrutar de la película “El Santo de la Espada”.

Se trata del film histórico-épico “El santo de la espada” (1970), dirigida por Leopoldo Torre Nilsson, quien se basó en la novela homónima de Ricardo Rojas, con guion de Beatriz Guido y Luis Pico Estrada.  En esta obra, que resultó un gran éxito de taquilla, se narra la vida del héroe nacional argentino (interpretado por Alfredo Alcón) desde su arribo a Buenos Aires en 1812 hasta su exilio definitivo de la Argentina.

El Santo de la espada es la primera superproducción que abarca la totalidad de los años de actuación de San Martín en el escenario sudamericano, de 1812 a 1824.

Sobre Torre Nilsson
Es su propia visión del cine la que mejor alcanza a definir su obra (30 largometrajes): “No quiero -dijo- formar parte de un cine-píldora digestiva. No quiero hacer una película para que un indonesio digiera su comida y otra para que rían los que habitan la zona norte de Avellaneda. Ni transpirar por un film que congregará vastos auditorios de Cuba porque la protagonista tiene un hermano que es propietario de la zapatería más importante de La Habana. Quiero hacer un cine que tenga patria, sí, eso. Un cine que ande parásito entre las afligentes tinieblas de un mundo en descomposición. Intuyendo, ganando pequeñas y tremendas batallas para el espíritu, gritándonos que el hombre todavía no ha sido derrotado por el hombre. Ajeno a superficiales modismos de presuntas minorías. Vital y sangrante. Vivo y necesario. Ni cine-teatro, ni cine-pintura, ni de vanguardia, ni de masas. Un cine cálido y auténtico, producto de mi soledad, mi oficio y mi tristeza.”

En el libro “Leopoldo Torre Nilsson. Una estética de la decadencia”del Museo del Cine de la Ciudad de Buenos Aires y del Incaa, María del Carmen Vieites compiló textos de Gonzalo Aguilar, Claudio España, Ana María Amado, Mónica Satarain, Daniel Grilli, Raúl Horacio Campodónico, María Gabriela Misraje y Pablo de Vita. La obra se completa con el cuento del cineasta “La mucama” (primera narración del realizador, dada a conocer en la revista Capricornio en 1954) y su filmografía y bibliografía.

El nombre del libro se refiere a la decadencia de la burguesía argentina, tema que el realizador -en sintonía con su esposa, la escritora Beatriz Guido- abordó con maestría.

Como dice Vieites en la presentación de la obra, “su enconada lucha para plasmar libremente -aunque no siempre lo consiguiera- su lectura de la historia de un país cerrado, asfixiante y castrador, que sufrió en carne propia, es digna de ser revisada en estos desesperanzados, inciertos y difíciles tiempos que nos toca vivir”. La investigadora detalló: “Tomamos a Babsy como factor de quiebre en el cine nacional, como el hombre que marcó una bisagra dentro del lenguaje cinematográfico. El, junto con Ayala, rompió con cierta estructura del relato, con esa cosa acartonada, ya perimida, y renovó el lenguaje tanto como los temas, iniciando lo que luego fue la Generación del 60”.

La personalidad de mi tío Babsy, como se lo conocía incluso en el ambiente de cine, era multifacética, abarcaba desde el cine hasta la literatura y sobresalía siempre su intensa lucha en favor de la libertad de expresión.

Alejandra Noseda Torre Nilsson