La vice presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Patricia Gimínez, apoyó la iniciativa, aunque con advertencias.
“Si el gobierno no toma acciones para combatir la inflación, el desempleo y la pobreza y para impulsar el crecimiento económico, saneando las estadísticas, para utilizarlas como instrumentos de diagnóstico, evaluación y corrección de las políticas públicas, de poco servirán los aumentos automáticos en las asignaciones sociales, que hoy aprobamos en el Congreso”.
“Siempre hubo consenso con los argumentos que dieron origen a la Asignación Universal por Hijo y siempre pedimos: que fuera realmente universal y su marco, una ley, por eso vamos a apoyar en general, pero esta ley llega seis años tarde y además llega mal”, criticó la legisladora radical.
“No es universal –añadió-, porque estigmatiza y discrimina por el lugar de residencia, favoreciendo o castigando a sus beneficiarios, según un criterio geográfico caprichoso, así los niños de seis, de las nueve provincias con menor número porcentual de menores de edad bajo asignación, son favorecidos, y al mismo tiempo son perjudicados los chicos de Chaco, Formosa, Santiago del Estero, Misiones, Corrientes y Salta, con mayor número porcentual y con altísimos niveles de desnutrición”, explicó la Diputada Gimínez.
La excusa, continuó, es la zona geográfica desfavorable, el mayor costo de vida de la Patagonia, pero, para la pobreza y el empleo y la inclusión, esta no es una zona desfavorable, todo lo contrario, tiene los mejores indicadores, por ejemplo en Tierra del Fuego hay solo un 11% de los chicos con cobertura y en Chaco el 52%, como vemos, la discriminación es flagrante y duele”, remarcó.
Finalmente Gimínez recordó que “los aumentos han sido dispuestos en forma discrecional por el Poder Ejecutivo, la lógica detrás de ellos siempre fue la inflación, a pesar de no ser reconocida expresamente, ni por las estadísticas oficiales, ni por el relato; los incrementos otorgados y la necesidad de actualizarlas muestran a las claras que es la inflación la que está castigando cada vez más a los sectores de menores recursos, que paradójicamente es a los que se pretende proteger a travís de la asignación universal”.
Fuente: edicioncalificada.com.ar