Este libro reúne 100 lugares icónicos de Buenos Aires que fueron recorridos y fotografiados por la periodista Mariela Blanco con el afán de poder mostrar el eclecticismo de una ciudad que, falsamente, creyó ser en tiempos de abundancia “la capital de un imperio imaginario” cuando era, en realidad, el epicentro de un país “que progresaba de noche mientras el gobierno dormía”.
Estos pensamientos esbozados por la intelectualidad francesa en tiempos del Centenario explican por qué hay tanta heráldica en pseudopalacios donde jamás habitó la nobleza. O por qué hay tantos techos con mansarda para facilitar el deslizamiento de la nieve cuando por estos lares apenas vimos unos pocos copos blancos en dos oportunidades.
La dificultad para encontrar una definición de Buenos Aires que le hiciera justicia a su belleza tan auténtica como ficcionada, motivó la escritura de esta obra que se puede leer de forma tan desordenada como el paisaje urbano de una Reina del Plata que, de vez en cuando, pierde su corona en algún piquete y, sin embargo, siegue siendo soberana.
Fotos @peterhorquera