A 25 años del disco más excelsior de Gustavo Cerati: Bocanada

La separación de Soda Stereo era realidad y también con Cecilia Amenabar entraba en el mismo sentido. Gustavo habitaba en el estudio Casa Amarilla para afianzar la idea de ser productor de Leo Garcia y Flavio Etcheto y allí tomó forma Plan V. A modo de zapadas, comenzó a invitar a Cristian Basso (Fricción), Aitor Graña (Juana la Loca), Fernando Nalé (IKV) ingresa por recomendación de Taverna y Martin Carrizo (ANIMAL). Para la grabación del disco “Bocanada” los músicos tenían que imitar los temas que Cerati tenia compuestos en un pen drive. Bocanada es un título lógico y poético para alguien que calmaba su ansiedad fumando.
Amenabar le prohibía fumar en casa.

Bocanada se construye a base a un sampler de Eruptión; el rock sinfónico en su máxima expresión. Se grabó en dos partes; que deviene en construir la cadencia de su canción. La relación con Cecilia era fría y distante. Cerati escuchaba todos los días House, el disco habla de una pareja que se está separando con melodías de cocina. Gustavo iniciaba una nueva etapa: volvía a ser jóven otra vez.
Tabú pone diferencias claras con Soda Stereo; con su ritmo selvático extraído de un oscuro tema de Spencer. Allí “un nuevo fin”.
Puente sería el primer gran éxito de Gustavo como solista. La frase “gracias por venir” se puede leer “gracias porvenir” y se mete dentro de sus sentimientos: ” usa el amor como un puente”. Puente era más hit de la que se conoce; Cerati la fue escondiendo porque no quería que sus efectos astrales fueran tan evidentes. Es causa y es efecto.
Bocanada tuvo sus inconvenientes. Cerati disfrutaba cada una de grabaciones. Había cierta espiritualidad flotando en el aire. Delicadas intervenciones en Beautiful, que en algunas frases invita a Cecilia. Fluir sin un fin; canta en Río Babel. Un guiño fuerte a Jorge Luis Borges en Aquí y Ahora dónde habla de “senderos que se bifurcan”; es más, dice Sé pequeño; sé una gota en el jardín; sigue el curso de agua.
Versos intrigantes de Engaña que tiene la curiosidad que tiene un segundo de silencio intencional y gritos ahogados “se rompe la canción, apenas duele” es por Soda.
Paseo Inmoral parece de otro disco, pero le sienta bien. Bocanada tenía el título de Un gran inventor, pero iba en contrasentido. Para este disco, Gustavo tuvo que firmar un nuevo contrato con BMG donde recibió una valija de dinero.
Verbo carne, la monumental letra inspirada en el recuerdo de su padre, tiene un loop electrónico sobre el cual canta y nada más. Creció la idea de orquesta; llegaron a tener 120 músicos, aunque, por sugerencia de Alejandro Teran, se redujo a 50. En la mezcla; el coordinador Daniel Kon tenía una reunión con Deborah del Corral; Gus lo sabía, los invitó a un pub donde Deborah y él conversaron y el chispazo comenzó.
Bocanada termina con una suite electrónica que comienza en Y si el humo está en foco. Alejandro Ros diseñó la tapa en la que se ve a Cerati bañado en azul con rubíes rojos como estrellas.
El disco estaba listo para su lanzamiento el 11 de junio, pero debido a una imposición jurídica planteada por Amenábar, su aparición al público se demoró unos días.
Curiosamente, el corte de difusión fue Raíz que destila calidez y familiaridad con distintivos folclóricos. Es un regocijo de un hombre que rompe sus amarras. Bocanada es una obra maestra, una compleja ingeniería que desarrolla un universo musical inédito.
En Colombia, Soda Stereo nunca realizó una conferencia de prensa, para Bocanada Gustavo firmó autógrafos en el Centro Comercial Gran Estación como una manera de promocionar el disco. Luego se fue a bailar mientras Shakira y Antonito de la Rúa estaban en el VIP.
En Bs. As., se presentó en el Gran Rex; con un escenario estéticamente muy fino y prolijo; con un show para un teatro no para un estadio.